miércoles, 26 de enero de 2011

MOTOR&MOTIVO

M&M
Compartiendo sin egoísmo un pareo, con la arenita caliente de las 4 de la tarde enredada en nuestros pies, hoy Rubeni y yo llegamos a la conclusión de que somos motor y motivo.

A veces yo descubro y él lo publica.
Leo y él te la cuenta.
Empiezo la discusión, él se enoja.
El empieza la frase, yo termino el discurso.
Yo pienso en la canción, él la canta.
Yo cocino, él se lo come.
Yo ensucio, él lo limpia.
Yo traje al mundo, él provee y cuida.
El trabaja, yo me canso.
Tengo sueño, él duerme.
El paga, yo gasto. Yo gasto, el paga.
El recoge si yo la riego. Yo recojo, si él la riega.
El dice, yo ejecuto.
El no sabe, yo tampoco (ahí es cuando se complica todo)
Tengo la idea loca, él tiene la disciplina para llevarla a cabo hasta el final.
Doy el primer impulso, él lo hace suyo, cree y corre con toda su fuerza.
Tengo la pesadilla y él la oración que  tranquiliza.

Un fuerte y gran motor necesita un fuerte y gran motivo para funcionar.
 Un poderoso motivo, no avanza sin el motor que lo impulse.
Alternamos los papeles, a veces él es el motor y yo el motivo, y a veces él es el motivo y yo el motor.
Motor y motivo, o cordón de tres dobleces, como sea que fuere, cada vez más nos sorprendemos al darnos cuenta de que somos el uno para el otro. Escogimos bien, somos buena dupla,  motor y motivo.

Catylabella

lunes, 24 de enero de 2011

Fuerzas

Hace dos semanas fuimos a Saint Bartolo (¿qué tal?). Los pescadores dejan sus botes en el mar y Rubeni piensa que son un área común. Nada hasta uno de ellos, se sube, se mece y recibe el sol como lagarto. Cuando ya se cansa, regresa y nos comparte entusiasmadísimo su feroz experiencia tratando de arrastrar a todos al mar para ir con él al bote. Esta vez, Waner cayó. "Me voy al bote con mi papá". Vale decir que Waner es muy buena nadadora.
Pasados unos minutos, a lo lejos vi una cabezita en el agua frente al bote y Rubén dándole indicaciones de cómo subir. Un ratito después los brazos de Waner se sujetaban fuertemente del bote pero al parecer su cuerpo no cooperaba con querer subir. Luego, Rubén, que se ve más pequeñito desde lejos, jalaba con todas sus fuerzas el brazo de Waner y no pasaba nada. Un ratito más y Rubén jalaba la pierna de Waner mientras  ella trataba de subir con sus brazos...después de media hora de intentos Waner regresó sin poder subir al bote. Primero le ganó la risa hasta que le dieron náuseas de tanto intentar.
Al ver que llegaba a la orilla más cansada que un naúfrago recordé cuantas veces me he sentido así. Esforzándome tanto, tanto, para que al final ya ni me acuerde para qué lo intentaba.
Dándomela de Salomón, mirando por la ventana de mi casa, pienso, que las fuerzas hay que saber usarlas. Lo más pesado de ellas para todo aquello que trascienda, en mi caso, mi familia. El resto de la fuerza, distribuirla sabiamente, para no llegar al final de nuestros dìas con la lengua afuera recordando vagamente para qué nos esforzabamos tanto.
La semana pasada, en mi cumple, volvimos al mismo cuadro. Rubén se subió al bote, Waner lo siguió, pero esta vez, CON INTELIGENCIA, logró subir. Pero volvió al rato, con mareos. Definitivamente, los botes no van con ella.
Ya va acabando Enero del 2011, ¿cómo andamos de fuerzas? Espero que bien y no como un lagarto que yo conozco por ahí, que bosteza y bosteza de agotamiento por el equivocado enfoque al gastar sus fuerzas. Pero bueno, estamos aprendiendo, con tal de que cuando hayamos aprendido, ya no nos queden reservas de fuerza. Cuidado, seamos sabios. AH! Y recuerden, disfrutar es una capacidad, no una oportunidad. Si esperas la oportunidad para disfrutar, tal vez nunca llegue...disfruta del fruto de tus fuerzas.

Catylabella

martes, 18 de enero de 2011

Crónica para mí

Bueno. Para que les digo que no, si sí. Llega un momento en la vida en que ya no sabes si celebrar o encubrir. Converso con amigas que tienen 26 y yo me siento igual, pero ya estoy 10 AÑOS ARRIBA. Oh my God! Los cuarenta se acercan a paso apresurado...y cuando miro atrás, cada cosa que he vivido me parece que fue ayer. A veces cuando no tengo nada en que pensar, trato de recordar que hice en cada cumpleaños. A ver que tal me va. Si me quieres dar un regalo de cumpleaños, lee este blog. PERO, si estás cerca, caéte con el regalo físico. Mis hermanos en el extranjero, ya saben.

Cumpleaños 1 al 4 - No sé, no opino. Creo que es lo justo. ¿Tu te acuerdas del tuyo?
Cumpleaños 5 - Creo que conocí a mi papá en Huaquillas (frontera Perú-Ecuador)
Cumpleaños 6 - Una fiestita registrada con fotos. Aparece una piñata de caperucita atrás de los niños, pero sin relleno.
Cumpleaños 7 y 8- Creo que fuimos a la playa (para variar) y en la tarde mi sobrino Gerson de 4 años me aguó la fiesta perdiéndose con un niño de tres por casi seis horas. Apareció en la Policía Femenina de San Felipe.
Cumpleaños 9 - La pasé en Ecuador. Engordé una barbaridad. Una riquísima torta. Gente que no me conocía me regalo muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuchos regalos.
Cumpleaños 10 al 12 - No sabe, no opina.
Cumpleaños 13 - Mi amigo Coky me regaló un set de colonia, jabón y crema de manos de su mamá. Todo olía a tía.
Cumpleaños 14 - Me fui a vivir a Ecuador.
Cumpleaños 15 - Celebrado por partida doble. En Guayaquil y en Quito.
Cumpleaños 16 - Un enamoradillo (prefiero no decir el nombre porque lo encuentras en el facebuz), no se puso desodorante y me llevó a un basurero a "conversar".
Cumpleaños 17 - In love.
Cumpleaños 18 - Con Waner de 3 meses y yo llena de piojos. Me los saqué haciéndome la permanente.
Cumpleaños 19 al 29 - Franco, franco, no me acuerdo. Creo que fueron años difíciles.
Cumpleaños 30 - Abrí la tercera década de mi vida yéndome sola a Ecuador por tierra, a buscar a mi papá. Tipo Marco y su mono Amelio...¡No te vayas papá!
Cumpleaños 31 - 32 - No recuerdo.
Cumpleaños 33 al 35 - La gente que me quiere me hace sentir especial.

Bueno, si llegaste hasta aquí, me quieres mucho o aunque no me conoces eres curioso. Sea como fuere...muchas gracias. ¡Feliz cumpleaños! Y que se tripliquen, que vengan, muuuuuuuuchos más.

Catylabella










domingo, 9 de enero de 2011

Reflexiones de un Sabático

¿Son poemas metaleros?¿Sabático?
Es un término que no se conoce mucho y por lo mismo hay muchos cocacolitas por ahí.
El período sábatico consiste en un reposo de todo aquello que te estresa o te saca de  equilibrio.
El día de ayer terminó el mío. En el trabajo, porque andaba medio torombola, me dieron este tiempo sábatico para buscar mis neuronas perdidas, recoger mis emociones y tratar de pegarlas, pensar, reconsiderar, enfrentar miedos y al final, volver a la normalidad.
Las primeras semanas era desesperante saber que tengo que hacer pero que no lo voy a hacer. Me sentía toda una jubilada. Me despertaba temprano, empezaba el día ¿para qué? De ahí que comencé con este blog para hacer algo. Hice ejercicios disciplinadamente, todo estaba en orden. Con el paso de los días, me llegó todo. "Me han dado permiso para vagar, vagaré pues" Y todas las áreas responsables de mi vida entraron en reposo. Estuve como fantasmita enpijamado como tres semanas. Creo que solo salía los domingos a la iglesia. Si me faltaba comprar algo para la comida, cambiaba el menú, pero no salía. Leía un poco, pensaba casi nada. Decidí no preocuparme. Habitabamos en una simbiosis super cool con mis hijas. Revoloteaban alrededor mío. Veíamos tele juntas. Leíamos juntas. Me bañaba a veces, soy sincera. También fue cool. Total, no veía a nadie, nadie tenía porque olerme. Dormí, dormí, dormí y dormí más. También armé rompecabezas.Todos pasaban a mi alrededor acelerados mientras yo iba a paso lento, como Neo en la Matrix, otra realidad completamente. Las palabras angustias, ansiedad, y afán se  fueron alejando de mí. Por ahí lloré un par de veces, pero ya era por deporte, para no abandonar el drama femenino que me caracteriza.
Hasta que un día, me desperté normal. Ya podía pensar bien. Mi mente había estado tan agotada que no lo noté hasta que estuve recuperada. Es ahí donde noté que con la mente sana y fresca mis pensamientos por sí mismos se ordenaron. Comencé a disfrutar, que era una sensación que había falsificado a lo largo de mi vida.
Por ahí, Rubén entró en su sabático también, más corto que él mío. Mientras el dormía, yo seguía en mi proceso de recuperación.  Pasaron las semanas y mis relaciones interpersonales se hicieron más fuertes. Había tiempo para ser sincero, para sacarse la máscara y mirarse ante el espejo de un amigo que te ama. Había la libertad de recibir los jalones de orejas de tus hermanos, y sentir desde lejos todo su amor. Empecé a recuperar y ya no a recuperarme. Mi vida empezó a alcanzarme otra vez. Con los días la veía distinta, alegre, positiva, llena de esperanza, llena de oportunidades. Pero algo me decía que ya pronto debía volver a la civilización y al trabajo.
Fue ahí cuando me pregunté: ¿qué debo hacer para no perder esto que tengo ahora?¿Para no perder mi frescura mental, la paz de la casa, la capacidad de disfrutar los pequeños momentos valiosos y no verlos pasar a mi lado por andar afanada, turbada y confundida? Encontré las siguientes respuestas:
1. Por más que el mundo esté loco y sobre ruedas, he decidido andar a pie. Para esto, todo lo que haga debo trabajarlo con una expectativa a largo plazo.
2. Familia y amigos de verdad, son los verdaderos tesoros. Para todo lo demás están Visa y Mastercard.
3. Aprendizaje y conocimiento: básico para evitar la confusión y la ansiedad.
4. Saber esperar.

Hoy volví formalmente a trabajar. ¿Dónde está el apuro? ¿Dónde está la desesperación por conseguir y demostrar ya no me acuerdo qué? ¿Dónde está eso que te ponía la soga al cuello, mujer? No sé dónde están y tampoco pienso ir a buscarlos, never again.
Desearía que cada ser humano en la tierra tenga la oportunidad de experimentar este reposo, este sabático. Y sé que Dios, a su divina y poderosa manera te dará el tuyo. Si ya sientes que no das más, pídeselo en tu idioma. En mi caso, hace más de cuatro meses, fue cuando repetidas veces le dije: "Ayúdame, ya no puedo más". Muy bajito, desde lo profundo de mi corazón y desde lo enredado de mi mente. El me oyó, me contestó, me cuidó, me sanó, me hizo libre.

Muito obrigado a todos por todo seu amor e paciência comigo neste tempo (la última del sabático, aprendí algo de portugués por ver en el youtube la mejor novela brasilera: Vale Tudo ).

¡Agora voltei!


Catylabella








viernes, 7 de enero de 2011

Oídos Sordos

-Waner ¿qué tal te fue en tus clases?
Silencio total. Seguimos caminando juntas y no recibo respuesta.
-Rebeca ¿cuándo viene Silvana a la casa?
Sin respuesta. Seguimos caminando las tres.
Martes en la tarde, la casa está en silencio. Waner estudia frente a mí. Rebeca mira televisión. Yo veo un video por internet y no hay sonido alguno en la atmósfera...
-Rubén, paga el pasaje -otra vez no recibo respuesta. -¡RUBEN PAGA EL PASAJE!
-¿Ah? ¿Qué?

¿Será que encontré la paz que tanto buscaba? ¿Será posible caminar cinco juntos e ir todos en silencio? ¿Será que me están haciendo la ley del hielo y nadie me ha avisado? ¿Será que nos estamos debilitando como familia y ya no nos comunicamos? ¿O será que cada uno tiene un mp4, mp3, ipod, celular o lo que sea con audífonos y sólo escuchan lo que les gusta?
Meses atrás tuvimos una tensa situación en casa por un par de audífonos pérdidos (Waner). Luego vino una tragedia griega por un mp4 decomisado como sanción a una desobediencia (Rebeca). Hace un par de semanas, un tsunami de nostalgia por la música invadió a la cabeza del hogar y nació una fuerte necesidad de un aparatito de esos (Rubeni).

Sólo Daniela y yo estamos a salvo de esta plaga. Somos las únicas que nos enchufamos las chichas de las combis, el timbre de la puerta, la alerta de los nextels...en conclusión, las únicas que nos comunicamos escuchando mientras que los otros tres viven perdidos en su música, libres de la vida cotidiana.

Ayer, mi amiga Catalina Creel se aparece con esas dos tripitas delgadas que cuelgan por la abertura de la camisa, polo, etc, y el par de audífonos colgando.

-¿TÚ TAMBIÉN?
-Claro pues.

Sólo les digo una cosa. ¿ME ESCUCHAN?. Será que todavía vivo en la época de las cavernas, pero por favor, si hay alguien a tu lado, sobretodo alguien valioso para ti, libera tus oídos y escucha. No pierdas la valiosa oportunidad de ganar el corazón de otra persona simplemente oyéndola.
Pero TODO TIENE CONSECUENCIAS. Hace un par de años, iba en una combi. En eso un hombre saca su mp3 de su maletín con sus audífonos. Se los coloca, pone su música y es inmediatamente libre de la tortura chicha que veníamos oyendo. Pasaron unos minutos y con la mirada perdida a través de la ventana, con los pensamientos bien lejos, canta a gritos: YO QUIERO TENER UN MILLON DE AMIGOS...desafinado, con la letra enredada...ji ji ji... O como cuando Waner está escuchando música y pretende hablar: MAMA ¿QUÉ VAS A HACER DE ALMUERZO? ¡Claro! Porque ignora que en el mundo real todo está en silencio y el mundo de sus dos oídos hay todo un concierto y me habla como si yo estuviera toneando con ella.

Sólo piénsenlo. Por mi parte, un día de estos hago unos tallarines de audífonos, se los doy a Big Mama, experta coneja roedora de cables y recupero esos preciosos tres pares de oídos que andan fugando al país de la maravillas por la veredita de la ilusión musical...
En todo caso, ponte los audífonos para cumplir con el viejo dicho: "A palabras necias..."
AMÉN

Catylabella














lunes, 3 de enero de 2011

Diciembre

Un hombre sabio que pasaba por el camino se sentó al lado de una mujer muy delgada con cara de angustia y vestida de lo que fuera un traje de fiesta. Sostenía unas pocas monedas en sus huesudas manos. Su boca se movía pronunciando muy bajito que había gastado para olvidar el pasado. El hombre sabio observó una bolsa llena de restos de comida y algunos juguetes. No sintió compasión por ella, sino que en silencio y con resignación recogió la bolsa, se la echó al hombro y cargó a la débil mujer en sus brazos.
-Siempre haces lo mismo. Te encuentro a medio camino y tengo que llevarte conmigo.
-¿Y ahora? -le dijo mientras el caminaba firmemente.
-Esa pregunta te la debes hacer al inicio de tu locura y no esperar que yo la responda como toda la vida, Diciembre.
- ¿Qué va a pasar ahora Enero?
-Lo de siempre. Entre Febrero, Marzo y yo trataremos de ayudarte. Pero por favor, este año, recapacita...trata de llegar al final de tu jornada, completamente sana.
Se desplomó en sus brazos haciéndose más pesada. Esta vez necesitaron la ayuda de Abril, Mayo, Junio y toda la fuerza de Julio. Cuando Noviembre se despidió de ella, Diciembre estaba otra vez radiante, feliz, lista para celebrar. Había olvidado todo.


Con todo mi corazón espero no hayas conocido a esta Diciembre. Es terrible. Siempre necesitará la ayuda del resto del año para salir de la euforia de sus celebraciones.
Con todo mi corazón espero que Diciembre haya sido un mes de pasar buenos momentos que no te hayan costado la paz que te esperaba en enero y los siguientes meses.

¿Qué quiero decir con tanta metáfora?
Enero con cabeza fría.
Febrero con el pie derecho.
Marzo a puro cálculo.
Abril, guardando pan para mayo.
Mayo, mes de la madre, que tengas para poder regalarle.
Junio, regalale a papá, pero ten todo bajo riendas.
Julio, ajusta un poco para seguir adelante.
Agosto, no dejes de calcular los costos.
Setiembre, revisa que todo esté marchando bien.
Octubre, ya falta poco, no te vuelvas loco.
Noviembre, mira hacia atrás y sabrás si Diciembre  te espera con los brazos abiertos llenos de recompensas por tu sabiduría, diligencia, dedicación y por la buena toma de decisiones en paz y no como algo que se ha escapado de un centro de rehabilitación y que no ha aprendido su lección.

Hoy es el tercer día de enero. Estamos a tiempo de empezar bien y ¿quién sabe?,  de cambiar en este año la historia de nuestras finanzas.

Otros ya lo han hecho. Se les  llama PRÓSPEROS. La flaca misia de Diciembre piensa que son SUERTUDOS. I don´t think so.

Catylabella